Entre los criterios utilizados para justificar el mapa, que permite desglosar en potencia, altura y tamaña de pala de los aerogeneradores, está el de conocer también la ubicación de las turbinas individuales, así como la información, como la marca, el modelo, el área y la capacidad de crear nuevas oportunidades para la investigación e importante información para el manejo de la tierra y los recursos.
Por ejemplo, los datos mejorarán la capacidad de los científicos para estudiar las colisiones de fauna silvestre, las estelas causadas por las turbinas eólicas, la interacción entre los aerogeneradores y los radares con base en tierra, y cómo las instalaciones de energía eólica se superponen con las rutas migratorias de las aves.
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