“La consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, ha firmado un convenio de colaboración con la Comunidad de Regantes de El Carracillo (Segovia) para la realización de las obras de modernización y consolidación de esta zona regable… Para la modernización de esta zona se destinarán 27,8 millones de euros, de los que el 71% son fondos públicos”. Así comienza y acaba la entradilla de la nota de prensa de la Junta de Castilla y León que refleja también la visita de Clemente a Naturpellet y el anuncio de la inversión de 4 millones de euros dentro del PDR 2014-2020.
La inversión prevista en los PDR presentados por algunas comunidades autónomas (incluido el de Castilla y León) contiene importantes dotaciones presupuestarias para nuevos regadíos y modernización de los existentes, algo que la Comisión Europea no ha visto nada claro en la revisión de dichos programas. La biomasa con aprovechamiento energético, incorporada principalmente a los apartados de “inversiones en el desarrollo de zonas forestales y mejora de la viabilidad de los bosques” y de “transformación/comercialización y/o desarrollo de productos agrícolas”, cuentan con menos dotación.
Dotación dentro de las inversiones forestales
Desde la Junta afirman que “dada la relevancia del sector”, se establece un programa de ayudas para el aprovechamiento de la biomasa en el PDR 2014-2020 con una dotación de 4 millones de euros. Las actuaciones que incluye son inversiones para la movilización y/o transformación de productos forestales maderables, que incluye el procesamiento de la biomasa forestal para producir energía renovable y el astillado de madera, procesamiento de virutas y producción de pélets.
La nota de prensa puntualiza que “también los programas como Leader o Proder (también financiados desde la CE) tienen previsto incorporar ayudas para la mejora de la eficiencia energética en el medio rural, en los que se podrá incluir reposición de sistemas tradicionales de calefacción por sistemas de calderas”.
La visita de la consejera a Naturpellet sirvió también para recordar el liderazgo de Castilla y León en la producción de pélets, que ha pasado de cinco instalaciones en 2010 a diez en 2014, además de dos fábricas de briquetas situadas en Íscar (Valladolid) y Duruelo de la Sierra (Soria). “Esto supone un total de doce empresas, sin olvidar la existencia de varios centros logísticos repartidos por la Comunidad, donde acumulan pellets y astilla de cierta calidad”, destacan en la nota de prensa, además de recordar que “el sector empresarial de la biomasa supone más de 1.000 empleos directos con una inversión de 225 millones de euros”.
Ucrania se fija en la redes de calor con biomasa de Castilla y León
Otra visita, la de cuatro miembros de una delegación de empresarios del sector energético y de la construcción de Kiev (Ucrania) a las redes de calor de Soria, situadas en Ólvega y la capital, y a la que se construye en la Universidad de Valladolid, sirvió para destacar la pujanza de estas instalaciones en España. Dicha representación comentó a los responsables de Recursos de la Biomasa (gestores de las redes visitadas), que Ucrania es un mercado emergente atractivo para las energías renovables, con un potencial de recursos como la biomasa “impresionante”.
Los empresarios ucranios recordaron también que el conflicto entre su país y Rusia ya ha generado subidas en el precio del carbón, “que se pensó en un primer momento que podría ser el sustituto del gas que llega a Europa desde Rusia, sin embargo la fuerte contaminación de este combustible fósil nos ha convertido en uno de los diez países más contaminantes del mundo”.
